Quería plantear una duda que tengo y es que llevo un tiempo buscando información sobre cómo iluminar la zona de trabajo pero no encuentro gran cosa.
En cuanto a la luz natural, sé que lo ideal es tener una ventana que dé al exterior y, a ser posible, que la luz te dé de lado para evitar reflejos en la pantalla, como en la oficina de Pablo. Sin embargo, me preguntaba cuál debe ser la mejor manera de iluminar la mesa con luz artificial. Hace un tiempo una compañera me comentó que lo suyo es tener un fluorescente sobre la pantalla (algo así, pero en la pared y más arriba), porque de esta forma evitas sombras y tienes todo el espacio iluminado por igual. Mi idea en un principio era comprarme un flexo potente de los de toda la vida, pero vamos a hacer un poco de reforma en casa y me planteaba si realmente me vale la pena invertir en esto o no. ¿Qué opináis? ¿Cómo ilumináis vosotros vuestra mesa?
Referente a esto, lo que más me ha descolocado del curso, Pablo, ha sido ver la lamparita que utilizas tú. Ja, ja, ja, ja. ¿Te resulta suficiente? Yo la tengo igual en la mesita de noche y para leer en la cama va bien, pero no la he probado en el escritorio; me da la sensación de que se me va a quedar corta. Supongo que también debe ir en función de la luz que necesite cada uno para trabajar a gusto, en mi caso me doy cuenta de que necesito mucha claridad.
Pues nada, ahí lo dejo je, je. A ver si consigo decidirme.
Me parece un tema superinteresante el que comentas, y la verdad es que no he reparado demasiado en eso, así que gracias por sacarlo.
A decir verdad, no me preocupo demasiado por la iluminación por la sencilla razón de que intento trabajar lo menos posible cuando ya es de noche. Cuando es el caso, con la luz artificial tengo suficiente, y en todo caso, la luz del flexo para mí es suficiente. Además, es supercurioso, pero si a veces solo tengo puesto el flexo, inexplicablemente entro en estado de flujo y me concentro una barbaridad. No estoy recomendando que lo hagas exactamente, pero vaya, que a mí me funciona, no sé por qué. Es un flexo de Ikea, así que tampoco tiene mucho misterio. xD
He encontrado 3 artículos que te pueden dar ideas:
No soy un experto en el tema porque ya te digo que no uso mucho la luz artificial por suerte, pero a ver si con eso tienes nuevas ideas…
¡¡Por cierto!! Algo que sí he usado cuando trabajaba por la noche es un programita llamado f.lux. Al principio es un poco raro cómo se te pone el monitor, pero a mí la verdad es que me gustaba porque te quitaba un montón de luz azul que hacía que luego no pudiera dormir bien. A ver qué te parece y si te ayuda en algo…
¡De nada, Pablo! Me alegro de que te parezca interesante. En realidad, ahora que lo mencionas, te diría que a mí también me ha pasado alguna vez de tener encendido tan solo un flexo sobre la mesa y concentrarme una barbaridad, y eso que normalmente necesito mucha luz. Curioso, sí.
Gracias por los enlaces, he cogido un par de ideas. Me ha gustado en especial la de Philips, que propone un flexo con el que puedes regular la intensidad de la luz y adaptarla a la tarea que vayas a realizar. La voy a tener muy en cuenta.
Y por último, ¡lo de f.lux sí que es curioso! No lo había visto nunca, mañana mismo lo pruebo a ver qué tal, puede estar muy bien.
Coincido en que una buena luz de flexo en la mesa de trabajo ayuda mucho a la concentración, de hecho, yo uso una en mi escritorio donde tengo el ordenador y me sirve de mucha ayuda cuando trabajo delante de él.
También es verdad que lo tengo puesto detrás del monitor porque así no me molesta en la vista, unos leds pegados en la parte trasera del mismo también pueden dar un buen resultado.
Otra opción interesante es poner un aro de luz en caso de querer grabar un vídeo con la cámara del ordenador o hacer una videoconferencia con la mejor iluminación.
Gracias por la recomendación sobre los aros de luz. Justo estuve investigándolos hace una semana porque creo que pueden venir muy bien para grabar cuando es de noche. Ahora que por suerte hay luz hasta tarde en España no me hace falta, pero sin duda volveré a echarles un vistazo más adelante. Lo malo es que hay tantos y tan parecidos que uno ya no sabe con cuál quedarse.
